Graciela Bialet
con las ilustraciones de Hebe Ángela Gardes

Comunicarte

En el ro los peces aprenden a jugar y a nadar. Saip, que nada al revs, quiere regalarle a su mam unos espejitos de mica. Pero los espejos suelen devolvernos imgenes que a veces no nos gusta mirar. La mala bicha Bigotuda del Agua, pedigea y mano largo, intentar aprovecharse. Siempre le anda al acecho. No molesta. Hasta que un da Saip recuerda que "el que nada no se ahoga" y va al encuentro de su mam. Saip no tuvo miedo... las palabras lo rescataron. Las palabras siempre nos rescatan.

Una novela para nios pequeos acerca de la importancia del dilogo para enfrentar el miedo y la vergenza. En once burbujas, bup, blup...

El que nada no se ahoga.

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Graciela Bialet
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En el ro los peces aprenden a jugar y a nadar. Saip, que nada al revs, quiere regalarle a su mam unos espejitos de mica. Pero los espejos suelen devolvernos imgenes que a veces no nos gusta mirar. La mala bicha Bigotuda del Agua, pedigea y mano largo, intentar aprovecharse. Siempre le anda al acecho. No molesta. Hasta que un da Saip recuerda que "el que nada no se ahoga" y va al encuentro de su mam. Saip no tuvo miedo... las palabras lo rescataron. Las palabras siempre nos rescatan.

Una novela para nios pequeos acerca de la importancia del dilogo para enfrentar el miedo y la vergenza. En once burbujas, bup, blup...