Robin myers

Zindo & Gafuri

 

La casa siempre es una casa nueva,

y las cortinas aún no están colgadas,

y duermo de manera honesta y turbia, me despierto a menudo,

sin ninguna intuición de a qué distancia

me encuentro del océano o del choque que hubo en la autopista,

de la base militar o las huertas,

o de cualquier lugar más limpio o devastado, o inundado

de buganvilias, o que tenga

un cielo más taponado de nubes que el de acá.

Con lentitud, todo regresa a mí: paredes y rincones,

zapatos encimados, una pintura torpe,

mi cadera y su ancla, el cráter apacible

dejado por mi cráneo al sentarme derecha.

Siempre me quedo en donde estoy.

 

LO DEMÁS

LO DEMÁS
Compra protegida
Tus datos cuidados durante toda la compra.
Cambios y devoluciones
Si no te gusta, podés cambiarlo por otro o devolverlo.

Robin myers

Zindo & Gafuri

 

La casa siempre es una casa nueva,

y las cortinas aún no están colgadas,

y duermo de manera honesta y turbia, me despierto a menudo,

sin ninguna intuición de a qué distancia

me encuentro del océano o del choque que hubo en la autopista,

de la base militar o las huertas,

o de cualquier lugar más limpio o devastado, o inundado

de buganvilias, o que tenga

un cielo más taponado de nubes que el de acá.

Con lentitud, todo regresa a mí: paredes y rincones,

zapatos encimados, una pintura torpe,

mi cadera y su ancla, el cráter apacible

dejado por mi cráneo al sentarme derecha.

Siempre me quedo en donde estoy.